miércoles, 16 de octubre de 2019

No codicies el bienestar de los malvados

Proverbios 24:1-22

El pasaje de hoy nos enseña a no envidiar la prosperidad de los malvados, a desechar la maldad con la sabiduría de Dios y a ser diligentes en hacer la justicia. 


¿Cómo es Dios?

V. 12. Es quien cuida del espíritu de su pueblo. Dios mide en la balanza el pensamiento de las personas. ¿Con qué corazón se prepara para los domingos? Viva el día de hoy con un corazón puro para que Dios diga que fue gratificante.

Enseñanzas

Vv. 1, 2, 19, 20. ¿A quién le tiene envidia a su alrededor? No envidie la prosperidad de los malvados. La prosperidad de los malvados es una casa edificada sobre arena. 
Vv. 3-6. ¿Cómo es levantado su hogar? ¿Está siendo levantado con Palabra y oración? ¿No estará viviendo igual que las personas del mundo?
V. 9. Los pensamientos de las personas también pueden llegar a ser un pecado. Porque las cosas que pensamos dominan sobre nuestra obras. ¿Cuáles son sus planes? ¿Dios se alegrará con ellos?
Vv. 10, 17. ¿Con qué dificultades se ha enfrentado? Recuerde cuál fue el final de las personas de fe que fueron fieles en medio las dificultades. Sea consolado con su ejemplo y reciba nuevas fuerzas y valor.
Vv. 17, 18. No se alegre de la maldición que reciben otras personas. Alegrarse  de la dificultad que pasa otra persona es pasar a ser enemigo de Dios. ¿Cuál es su actitud frente a la dificultad de los demás? No está compitiendo con las demás personas y espera encubiertamente que les pase algo malo?
Vv. 21, 22. Debemos respetar a Dios y a las autoridades y no debemos desafiarlos. Los líderes son personas levantadas por Dios para que impartan justicia (Romanos 13:1, 2; 1 Pedro 2:13-15). Oremos para que la corrupción sea erradicada de la política de nuestro país y nuestra sociedad sea una sociedad trasparente. 

Oración: Ayúdame a vivir una vida pura en medio de este mundo corrompido.

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