Proverbios 21:1-14
Dios todopoderoso sabe todo lo que está dentro del corazón del hombre.
¿Cómo es Dios?
Vv. 1-3. Por más que los reyes piensen que gobernaron de manera justa, Dios sabe con qué corazón estuvieron gobernando. Por eso, antes que enfatizar lo que se muestra por fuera, debemos priorizar la sinceridad delante de Dios.
Enseñanzas
V. 3. Reflexionemos si esta semana estuvimos obrando con justicia y adoremos a Dios de corazón.
Vv. 4-6. Aquel que es trabajador recibe la recompensa de su trabajo. Pero aquel que tiene ojos arrogantes, el corazón enaltecido y anhela la riqueza fácil es una persona que corre hacia la pobreza y el pecado. ¿Cuál es el deseo de su corazón? ¿Es su deseo adecuado a su situación y capacidad? ¿Da la ofrenda con dinero ganado honradamente? ¿No está pensando que lo importante es la cantidad y no el origen del dinero ofrendado? La riqueza ganada de manera deshonesta no es bendición, sino maldición de Dios. ¿No está adquiriendo riquezas de manera deshonesta y pensando que eso es bendición de Dios?
Vv. 9, 10. Lo que más necesita la familia no es una linda casa, muebles hermosos o coches caros, sino la paz que sólo Dios puede dar. No pelee por cosas que son momentáneas, alégrese por tener a Jesús como Señor.
V. 11. ¿Cuál es la palabra que le llega al corazón? No se escape de la palabra que le duele y aplíquela a su vida.
V. 13. ¿No hubo algún momento en el cual ignoró la mano del pobre que pedía ayuda? En muchas partes del Antiguo Testamento, Dios ordena que los segadores deben dejar las espigas en el campo para que lo recojan los pobres. No se olvide que sus ingresos no le pertenecen por lo que debe apartar una parte para ayudar a los pobres.
Oración: Señor, tú sabes qué hay dentro de mi corazón. Voy a vivir siguiendo la justicia y la honestidad.
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