Proverbios 31:1-9
El pasaje de hoy es la única parte de Proverbios que se dedica exclusivamente a los líderes (rey). No sabemos exactamente quién es el rey Lemuel. El pasaje no está centrado en los beneficios que recibe el rey, sino que enfatiza las responsabilidades que vienen junto al cargo.
Enseñanzas
Vv. 1, 2. Es muy importante la correcta enseñanza bíblica de la madre. El poder que le otorga Dios a los padres es el poder para enseñar. Debemos enseñar a los hijos que teman a Dios, que amen al prójimo y que vivan con dignidad como personas. ¿Pone mucho celo en enseñarles de acuerdo al estándar del mundo, sin darle mucha importancia a la enseñanza bíblica? Si de verdad ama a sus hijos, debe enseñarles a temer a Dios.
V. 3. El líder debe cuidarse de la inmoralidad sexual. Tampoco puede utilizar la fuerza para someter al otro, porque el poder que Dios le otorga al gobernante es para que sirva a los demás. Hay que ordenar la vida desordenada.
Vv. 4, 5. No debe ser esclavo del alcohol. No es que el alcohol en sí sea pecado. El problema está en el uso que se le da al consumo del alcohol. El líder que tiene muchas tareas por delante no puede darse el lujo de cometer errores en su juicio.
Vv. 6, 7. El alcohol tiene la capacidad de adormecer los sentidos del hombre. Pero el alcohol no soluciona los problemas ni hace desaparecer las preocupaciones. Lo único que da el alcohol es un poco de anestesia.
Vv. 8, 9. El rey debe realizar la justicia con los poderes que le fueron conferidos. Tiene que utilizar su poder para proteger los derechos de los pobres, los desposeídos y los necesitados. Debemos orar para que las personas que tienen poder teman a Dios y no utilicen el poder para cometer maldades.
Oración: Que los líderes de este país te teman.
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