jueves, 25 de abril de 2019

La corrupción de los dirigentes

Miqueas 3:1-12

El presente pasaje exhibe en qué grado la descomposición social de Judá se ha generalizado y, asimismo, acusa a la corrupción de los dirigentes como el origen de la misma.

¿Cómo es Dios?Vv. 1-4. Formó líderes para ejecutar la justicia en la sociedad. Los dirigentes de la sociedad, agrupación y organización fueron establecidos por Dios para que apliquen la justicia de Dios. Sin embargo, aquellos líderes que utilizan la autoridad recibida de Dios para colmar sus ambiciones serán sentenciados por Dios y erradicados de sus posiciones. Pues, Dios ocultará su rostro de ellos. Debemos orar por los líderes de nuestra comunidad para que en todo momento estén de parte de la justicia de Dios.

Vv. 5-8. Oscurece la percepción de los falsos profetas y llena de Espíritu y poder al profeta que proclama con verdad la palabra del Señor. Los líderes que, en vez de escuchar y enseñar con honestidad la palabra de Dios, comunican palabras agradables a los oídos de la gente perderán el entendimiento y serán, además, avergonzados. Empero, la persona que anhela vivir de acuerdo a la palabra de Dios será lleno de poder, de justicia y de idoneidad. ¿Con qué clase de persona se identifica usted?

Enseñanza

Vv. 5-8. El falso profeta no anuncia la palabra de Dios tal como la recibe, sino a su placer. Especialmente, ellos enuncian palabras agradables a las personas que les dan de comer y maldicen a aquellos que no lo hacen. Con dinero consiguieron el cargo de profeta. El anuncio del mensaje en beneficio propio de los profetas y la selección de las palabras para la satisfacción personal del pueblo son características peculiares de una comunidad corrupta.

Vv. 9-12. Toda la sociedad de Judá en general se corrompió como un edificio roto edificado sobre una base inicua. Pues, los arquitectos de la sociedad, es decir, los dirigentes (los jefes, sacerdotes y profetas), estaban completamente depravados. ¿El amor que tienen los líderes políticos y los maestros de la Palabra de Dios por el dinero no es un aspecto semejante a nosotros? Debemos orar para que este yugo de maldad sea quebrado antes que llegue el día de juicio de Dios.

Oración: ayúdanos a que nuestra iglesia sea una congregación que tenga como valor supremo la palabra de Dios y sea de esta manera una esperanza en el mundo.

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